El cambio

Sin darnos ni cuenta, como suceden las cosas.

Cuando aprendieron a esperarlas o cuando eran pacientes,

o cuando eran, sin preguntas.

Me convertí en el observador

narrador de los cambios de la Familia Billy Jones,

mi familia.


Y sin darme cuenta, yo ya no estoy con ella.

No son mis pelos en su albornoz, burdeos.

Soy por las paredes de la casa que me vio morir;

y soy «al seu cor», aunque ahora esté completamente diferente:

una vez al año, una nueva casa maya, hogar NAJ.

Dos años después, nutriéndose ella.

Otra familia, aunque estemos todos interrelacionados, completamente.

Partículas nuestras (pecas blancas y negras) en el auto

y un olor a pedo permanente.

Yo soy Lucas Billy Jones.

El primogénito.

¿Un recuerdo?

Tampoco ha pasado tanto tiempo humano,

tampoco es que no los reconozca.

Los he olido a casi todos.

Bien.

Han crecido mucho, pero YAAN sigue con la uñita a Matso.

Hemos traspasado las fronteras juntos,

nos hemos amado mucho,

frecuentemente,

a diario.

Todas las vidas que nos fue posible,

las vivimos;

el tiempo que nos perteneció,

el que nos fue dado.

Fuimos muy conscientes de nuestra fortuna,

de la belleza y del favor de los Dioses. Inhumanos por naturaleza.

Hoy sabemos que ella está tocada

por la inspiración

y que ella es abundancia.

De ella

nacimos el «todos nosotros»,

de una semilla de ella

y de una semilla de él,

iluminadas por los cielos, estrellas, astros, polvos y compañías.

De la conjunción de la vida y sus casualidades 

el propio deseo de la madre Naturaleza.

En otros tiempos humanos,

cuando se conocieron en Barcelona,

yo no había nacido.

Ni Billys, ni Jones,

aunque aquellos ecos

ya existían en sus otros

dos mundos, por separado.

Se acababan de encontrar

mar adentro,

hacia arriba de la montaña.

Ella dejó de ser fértil, apenas hoy.

 

Para mi gran amor.

Pruébalo

Está muy bueno, te gustan todos los ingredientes,

es un batido de fresas con canela.

Es una mentira de mamá, pensé yo.

No, contestó ella. En un tono contundente y gritón.

Soy pequeña

y hay cosas que todavía no me gustan.

¿Alguna vez lo probó

como cuándo se prueban las cosas por primera vez?

Con curiosidad, sin prejuicios.

¿Lo olió?

¿Experimentó la textura de la espuma de la leche?

Probablemente alguna de las pepitas

de las fresas, de los granitos negros,

se quedaría atrapada entre sus dientes.

 un motivo que no es capaz de explicarnos,

y quizás nunca llegue a comprender ella misma

decidió que no le gusta el batido de fresa.

¿Cuándo?

El de plátano, si.

El de plátano con fresa, tampoco.

La fresa sólo al natural.

Sin leche y sin canela.

¿Tampoco te gusta la canela?

Sólo me gusta el chocolate, mamá.

Encierro

Desde éste, mi encierro,

escucho las entrevistas de Rac1

a los presos políticos catalanes del Procés.


El tiempo se nos detuvo,

a todxs por motivos diferentes, claro. Tenemos cierto tiempo parados, como esperando algo. Y cuando te paras, suceden las cosas de otra manera porque los acontecimientos se te adelantan, y se van a habitar a otros lugares-aparecen y desaparecen, cuando tú no te mueves y no te das ni cuenta.

Cuando nos separan, nos dividen, nos encierran, nos atemorizan y nos obligan a quedarnos en casa: ¿Qué es lo que sucede?.

¿Qué me ha sucedido? Lo no tan obvio es la muerte y el renacer diario.

Acompañada y agradecida. Eso también. Lo que tenía que suceder: la FE y la ESPERANZA. También.

Creo que suceden cosas horrorosas y quizás podemos mirar hacia otros lugares para escapar, para huir. Pero la oscuridad también nos habita por dentro. También. Y nos da mucho miedo la noche. Y por eso rezamos.

Cuando el desastre llega: ¿necesitamos escuchar y obedecer? Cuando el miedo nos paraliza, nos detiene y nos hace buscar la cueva donde resguardarnos. Valoramos nuestra vida, rodeados de tantas muertes.

 

 

 

 

 

 

Twee Rivieren_Part 2

Una mañanita

todas las criaturas vivas al unísono

clamaron al cielo, como una orquesta sinfónica que interpreta composiciones de Xenakis:

Algunos gritos de pura esperanza y otros de dolor.Y también de celos.

Pájaros piando, gacelas croando, jirafas en un trote desgarbado despavorido, bramando a las nubes.

Trompetas agudas entre cuerdas estiradas de violonchelo y notas rotas, gordas, terribles. Largas…

A partir de aquel día, las quejas pesadas de todos los árboles secos se suspendieron en un silencio vacío, y sus troncos cayeron hacia el magma. Apareció una luna llena que les iluminó las enjutas caras de La nada:

Ya no habría más descensos de nubes y sí unas terribles necesidades de agua.

Se avecinaban épocas de Sequía...

Twee Rivieren_Part2, en Lettera– Conservando las letras originales.

Así terminan los idilios, sin guiños de comprensión, ninguna.

Nos miramos, pobres. En silencio.

«Abuela,

aquélla de allá

-señalando-

no se parece a una tortuga?»

Ya no existía la caza en abundancia. Los elefantes fueron los primeros en emigrar, los hipopótamos y todos los Grandes Reyes de la Selva. Los primeros inmigrantes de la Tierra, mucho antes de los San de complexión bajita. Muchos de los Ñus les acompañaron, también los leones dependientes, los carroñeros.

El viento cada día fue erosionando la tierra, las rocas se fueron volando, todo se fue,

pulverizando, las mesetas comenzaron a disolverse en dunas de arena, frágiles y leves.

De arena roja, de granos cobrizos del color del fuego hermano, compañero, imprescindible

del Desierto del Kalahari.

A los árboles se les quemaron las ganas, aunque muchos renacieron con espinas agudas,

sus frutos se empequeñecieron, se avinagraron sus venas y dejaron de desprender aquel olor a manjar del trópico,

pero tú no te acuerdas.

Arrugados, sin poda por los animales salvajes, apenas alguna rama crecía con FE, hacia arriba.

Buscando la humedad, entre una maleza áspera, que la enmarañaba

Gozando del sol…

Continuará.

Reflexiones, compañeras

Cuando habitamos y compartimos nuestros espacios, cuando estamos en-por casa, por no ponerme intensa-

El sol comienza a calentar, en orden: geranios, azaleas, alegrías y cactus. Los que han sobrevivido a la gran nevada y algunos tiestos que rescatamos de la calle. Es lo mínimo que podemos hacer para cuidarnos, dedicarnos un rato cada día al cuidado de los seres verdes. Vivimos enfrente del Instituto donde fui a votar, el Gregorio Marañón. Tenemos el privilegio de ver cómo grupos de jóvenes pintan sus muros con grafitis muy chulos, que embellecen nuestras vistas.

Disfruto de estar cerca del barrio de Tetuán, soy muy fan de los barrios del centro, pero el ruido es bastante ensordecedor dentro de la M30, muchos instantes del día y de la noche, por igual. Recuerdo cómo era antes, cuando no existía el toque de queda. Y ahora, que se ha terminado…me pregunto si tonight resurgirá ese Madrid ruidoso por las noches. Durante todo un año lo único que hemos escuchado a medianoche era el semáforo para ciegos.

La primavera nos ha traído al PP muy reforzado tras un año de pandemia, aunque el PP gobierna Madrid desde siempre, y no hay nueva política. También nubes cargadas de lluvia fina, constante, días de nubes y sol, nubes blancas y negras, unas cuantas borrascas, «Hola Lola», en las tertulias de Jordi Basté, y formas en el cielo de nuestro balconcito.

No es tan fácil encontrar nuestro lugar favorito, ni tampoco compartirlo con ustedes.

Me comienzan a llover preguntas:

¿Cuál es tu lugar favorito?

¿Cuánto tiempo te llevó encontrarlo? ¿Cuántas veces cambió a lo largo y ancho del encierro?. Muy estadísticas, muy numéricas. Mucho viento. Desde dentro de mi «mejor versión» (from THE Good Place): la más creativa, apacible, soñadora, sociable…Desde mi balconcito, un lugar fuera de nuestra casa para pasar los domingos, y para ver llegar las tormentas: una detrás de la otra, domingo detrás de domingo.

Vivir cerca de un cafecito y una libreta, lo es.

Hay un intercambio.

Me enseñaron cómo alcanzar resultados, sin apenas vivir los procesos. Pareciera que el mundo se acelera, exageradamente, veloz. Nosotros con dispositivos y aplicaciones para vivir todo más rápido, completamente desfragmentados. Pero cuando estamos haciendo lo que nos gusta hacer, disfrutamos de cada momento…

Lo ensanchamos, habitándolo. Sentándonos con un café en la mano.

Y no es ningún lugar de paso. Nos fijamos en los detalles. Saboreamos cada trayecto, la leche. Sea la que sea: de vaca, de avena, de arroz o de coco. Cada instante, hasta que la taza se acabe: Y un ratito más, recordándolo. Incluso quietos en el mismo lugar, en cualquier banco. Randomly, disfrutamos. Cuando nos desprendemos del resultado, y de la meta…

Si viviéramos para o por un resultado,

Disfrutar de cada proceso, sin tanto miedo.

Educar con costumbres. Predicar con el ejemplo.

La vida de este planeta, para cada uno de sus seres vivos, es una historia que

¿trata sobre lo mismo?

Habita conmigo, este planeta-casa.

 

Recordar, sin nostalgia

Me gusta estar sola en mi casa por las mañanas de los sábados, PORQUE HOY ES SÁBADO, y escribir sobre el fin de semana, sobre mi máquina de escribir, regresar al rastro. Sobre una familia: sobre nosotros sedentarios, o sobre el cuidado de nosotros en nuestra casa. Ahora que no viajamos y ahora que los dilemas son otros, ahora que seguimos teniendo tierra en nuestra cama, y ahora que no la hemos movido desde hace un buen rato, por las habitaciones de la casa, no tanto rato! Ni por los barrios, ni por las fronteras entre España y México, o viceversa, como quieras… Reconocerlo, sin duda, me acerca a la satisfacción, que es un camino en dirección a la luz del sol.

Y al calor. Y a Flikr.

No me he planteado y si me he planteado, porque me planteo y replanteo…aquella noche de Sant Jordi, en una fiesta, en un terrat de Barcelona. Regresar una y mil veces a los lugares amados, cuantos! HE AMADO. Para abrazar a mis amados, para tocarles y contagiarme (y contagiarnos x1.000.000.000.000) …porque me hacen TERRIBLE falta, porque la distancia curte y te escama; y el amor se cuela en mis sueños.

Al final o al principio, no sé, puede que no sea ESCRITORA sino poeta, y que a la vez haga listas en la pizarra para 1. Poner música a NOTORIEDAD, como si mi vida así como está, tal y como es, no fuese suficiente. Me empeño, me esfuerzo, sufro. ¿Cuántas vidas quiero?

Ninguna sin música.

Tal vez sea una adicta a CAMINAR y al CAMINO; y por eso no pueda cambiarle el título a este Blog, aunque aquella aventura haya acabado…Tal vez sea sólo una enamorada de las mañanitas que nos seguimos cantando y de aquellos PLACERES DE UNA VIDA TRANQUILA. Adicción a los mariachis y a Veracruz!. Una adicta al AMOR y a las ODAS a México. Reconocerlo, sin duda, me reconforta y me alimenta, como una PATRIA QUERIDA.

Aquella noche en el terrat

me cogieron de las manos y fijamente, entre las líneas, miraron adentro de mis ojos, como una premonición.

Mi propia contradicción. Ante mí con claridad: mis sueños.

Reconocerlo, sin duda me fortalece.

Y florezco por dentro. Es primavera!

Vamos a cantar.

Dia del Padre


Así comenzó este día


Habita mi cuerpo

¿Y qué cuerpo quieres habitar? ¿Uno que no te duela? Uno blandito, como nuestra cama.

¿Existirá acaso, un cuerpo vivo sin dolor? Mi cuerpo me duele y mis músculos se tensan, mis dientes se pudren y mis encías sangran, como sangro yo entera cada mes. Blablabla. ¿Me seco?, ¿Ensordezco?.

Quiero. Deseo. Me Pido. Peleo.

Descansa. Uno esponjoso, como Bob.

Uno bien húmedo. Uno cálido.

Uno que me sostenga. El que tengo. Es único.

¿Qué es lo que tienes?

¿Qué es lo que tengo?

¿A mi alrededor? ¿Dónde habito? ¿Cómo llegamos aquí? ¿Qué me olvidé en los bolsillos?. ¿Cuáles son mis botas? de entre todas las que nos esperan ordenadas en el armario de la entrada. ¿Cuáles? Habito el cambio, la transición hacia otro lugar, eso lo sabemos. Esto es seguro, lo inseguro. ¿Cambia todo y de repente ya está? FIN. ¿El todo se acaba? ¿Para siempre? ¿Y deja de cambiar?

Nuestras mañanas.

¿Vuelve la vida a renacer de la muerte? Cuando estamos juntos, ¿cuánto tiempo después?

Son así.

¿Dónde?

Abandona la mente. Escapa. No lo puedes saber. ¿Lo puedes percibir?. Para habitar tu cuerpo y sentir tu piel en relación a este momento, basta con detenerte. Deja de hacer lo que estés haciendo.

Paráte. Deja de estar encima de tu madre.

Disfrutar del cuerpo, mmmmm,

además del sexo, basta con algunos ratos de sol, o con acariciar a nuestros perros, o con escribir de vez en cuando…

es suficiente y necesario a la vez. Microbios de salud para el cuerpo: elfondodelacuestion.

¿Alguien conoce algo que no cambie nunca? Acontecimiento, persona, padre, trozo de universo, relación. Lugares inmóviles congelados, recuerdos paralizados. Lo inerte, ¿quién lo conoce?.

¿Cambian de lugar? Todas la preguntas que me habitan…por dónde me habitan.

Tú búscamelas!

En qué habitación. Cuéntame el secreto. Así comenzaba este año de pandemia. Nuestra canción sobre el 2020, cuando aquel encierro obligado de tres meses. Sin movernos lejos de los cuadernos, con varios chiquitos y grandes, a la vez…soñando, latiendo, respirando hondo. Profundizando, agarrados.

2020 ¿Celebramos el día del padre? Sin flores y sin floristería, sin plantas, dibujamos a la Diosa Verde en la pared, y nos olvidamos de su nombre. Es la Diosa Tara!. Celebramos, un año después, cuando la pandemia todavía no ha terminado, tu ANIVERSARIO. Junto con el DIA del PADRE. Tuvimos mucha suerte porque pudimos estar juntos. Todo nuestro tiempo, en casa. Con mole.

No es cierto. Hoy hacemos el mole.

Hoy que no hemos terminado, que esta historia está inacabada, como todos estos fragmentos de viaje, sin viajar, te recuerdo mucho. Y suerte con nuestro pequeño balcón. Desde que regresaron nuestros amigos, los floristeros- después del cierre obligado- cómo pensábamos en ellos. Nos hemos rodeado de plantas de interior, por todos los rincones de nuestra casa. Un año después, hemos salido bien poco, no hemos pisado la arena de playa, seguimos buscando por aquí, ventanas adentro…

Así seguimos, encerrados por un virus. En nuestra terapia de luz. Sobreviviendo lejos y cerca de la familia que tanto queremos.

 

 

 

Twee Rivieren_ Part 1

Cuentan que en el ORIGEN,

en el inicio de todo, los árboles gozaban de abundancia de hojas y flores, y daban frutos dulces y constantes, por manojos, desbocados.

Cubrían de sombra los hogares itinerantes del pueblo San, que vivía libre al amparo de la Naturaleza, a veces generosa. Cazadores antes que agricultores, pero cazadores justo lo necesario para la supervivencia, no eran días de ahorro, sino más bien de escasez, austeridad, pobreza. No había espacio para el futuro, familias cobijadas en tribus, entre leones negros, a lo largo y ancho de miles de kilómetros de tierra fértil, en África.

Pero eran días de pasión, épocas en que las nubes se agachaban con suavidad, cortesía y deleite, cuando los árboles se estiraban. Los jóvenes llegaban a medir hasta diez metros en busca de intimidad, cuando los encuentros atardecían, para consumar un idilio más antiguo que el de cualquier mujer con hombre, o viceversa, simio o pez, aquel amor que se contaban de abuelos a nietos, verbalmente, de padres a hijxs a lo largo de generaciones de narraciones frente a un fuego amigo.

Compañero, necesario, bajo las estrellas.

Tambores, mantas tejidas a mano por las mujeres, tierra en el cuerpo, arena roja, pinturas, tatuajes. Cerdos salvajes desangrándose para la cena, lentamente, luces de estrellas fugaces y grasas vertidas sobre las piedras, ramas partidas, ceniza y ladridos de perros. Aullidos. Todo se mezclaba para acompañar a la noche, y todo se aprovechaba. Todo el calor…

De aquellos roces constantes, de las idas y venidas en vertical, de la atmósfera, a las raíces de Nuestra Madre tierra, de su ternura- que se pensó, sería eterna- nacieron dos ríos:

Auob y Nossob, hermanos.

-¿De nubes embarazadas?, pregunté.

Sí. Así nos lo expresa el viento del desierto y algunas palabras olvidadas por sus antiguos moradores, en las tierras altas del río Orange. Hoy, con caudal insuficiente. Como en un torbellino, como en un mantra Khoisánida:

Frondosas orillas, caer en desgracia, antes de la llegada de los granjeros de color.

Las nubes caprichosas dejaron de ser fecundas (el desamor forma parte del amor, dirán los budistas). Y semejantes desavenencias comenzaron poco a poco, sin que haya una constancia: un aviso por telegrama, una queja histórica, una carta a Roma…que nos explique por qué se suceden determinadas cosas en la naturaleza de las cosas determinadas, a pesar de los Griegos y de la Filosofía. Simplemente, todo fue cambiando de color, y de textura

Y de vida.

No hubo pócimas en las farmacias, pero sí se sucedieron una serie de «pruebas», hubo sobornos a Dioses y Científicos, hubo música, bailes, alcohol, setas y ruegos. Algunos dentro de «Iglesias», otros en cuevas apartadas con cuernos de Ñu, por si acaso «Alguien» de entre todxs ellxs, con mayúscula, era en MAXIMO RESPONSABLE.

Cabezas de animales feroces, los brazos de los guerreros más fuertes. Sacrificios. Maneras ciegas para someter los caminos de las nubes a la voluntad de la clase dominante. Continuara!

¿Te has perdido?

¿No sabes qué eres?,

¿ni qué semilla llevas adentro?,

¿te pudo el miedo

a la hora de decidir cómo mostrarte?


 

¿has querido complacer, has deseado tener éxito?

¿has buscado en el lugar equivocado?

En los ojos de los otros, en los míos….

Está bien, se vale, te resuenan mis palabras.   Se vale este guiño.   Se vale dar vueltas como las peonzas, las veces que sean necesarias, hasta que nos acabemos, como el Universo que rota, aunque te parezca que es el mismo, el mismo pinche lugar, el mismo pinche camino.  

Sólo es porque no lo observas lo suficiente. Eleva tu mirada.

  Atención. Todo ha cambiado.  

Deja que el tiempo que te pertenece, transcurra sin nada que hacer.

Deja de estimularte con las redes, apaga el teléfono y simplemente: Me aburro!.   ¿Te has pasado media vida escuchando respuestas? ¿leyendo, estudiando, escribiendo? ¿Para qué?  

¿Aprendiendo a construir con lo que ya tienes en ti?.

Nada te falta para ser lo que ya eres.

Aprende a creer. Sentencia .  

¿Qué te inspira? ¿Observar?

El bosque, el mar, la nieve, el sol, la Madre Naturaleza

y cómo Annia, mi hija, adiestra a Mahou, el galgo.  

Familia Billy Jone, ¿Qué sueñas?

Viajo (el nomadismo), camino, descubro, escribo. Respiro profundo y amo en manada.

Escucho a los honrados, a los valientes, tu respiración y la mía.   Aprendo sobre la sabiduría y leo a los filósofos, algunas novelas…y me pierdo con un café.  

Imagina que destruyes todo esto que ya eres. Que te convencen, que renuncias. Que no tienes ningún valor. Y que no te sirven, tus sueños. Si son tan pequeños, si no te trascienden, si te frustran, si te hacen sufrir porque no estás más cerca de alcanzarlos, media vida después. Imagina que lloras por esto.

Imagina que después de escuchar atentamente a los astronautas que viajaron a la luna, regresaron a tu salón y te lo contaron, sientes envidia y te das cuenta de que ya no te inspiran, de que no eres como ellos.

Tú nunca lo conseguirás porque eres sencillamente una mediocre. ¿ Te das cuenta?, ¿te escuchas?  

Fortalece tu ánimo. Alegría.

Debilita tus pasiones y reconoce los progresos que has hecho. Late. Vibra. Repasa el renglón, please. Regresa.  

Welcome home!

 

2020 Anno quaestionum





Diciembre 2020, Anno horribilis

 

Te gusta mostrarte. ¿Por dónde encontrarte?

También porque te gusta la amistad,

Sé que te haces preguntas.

 

Pero tú ¿también sonríes?

¿te has olvidado del resto? Toda tu alegría y diversión, ¿nos sirven al resto? ¿Me sirve a mi?, ¿me contagia? Qué bien!, es un espejismo? es una farsa?. Toda tu oscuridad, habita en tu intimidad, ¿verdad? Detrás. Oculta. A resguardo de Google. Bien por ti! Brindo por eso. Tú que tienes vida privada, eres una persona privilegiada. Tú que encuentras momentos de profundo silencio, cada día.

Tú que me tienes y yo que te sostengo. ¿Somos afortunadas? ¿Gozamos del guiño de los Dioses? Qué miedo te da eso. Feliz 2020! LOVE. Disfrutamos de la compañía (y eso es evidente allá donde dibujemos nuestros rastros), sabemos sacarle tajada a las palabras, aprendemos a nutrirnos el alma, y ahora sabemos de chispas.

CHISPAS avivadas por la conjunción de tu música y mis cuentos. CARPE DIEM. Por acá por donde cuelguen nuestras canciones y trapos, te encontraremos. Eres admiradora del compartir sin fronteras- recientemente apodada «Tintin» en tus privadas. Te encanta hacernos preguntas y eres controvertida. Responde tú por una vez, mójate: ¿Qué opinas, abiertamente, del show en el que convertimos cada uno de nosotros, las redes? De qué las alimentamos? Facebook, por ejemplo, como ejemplo de nosotros.

A mí me gusta ver la interlocución de conocimiento tipo canal de Youtube, en la forma clásica de preguntas y respuestas. Este año 2020 he disfrutado con Aprendemos Juntos, como ejemplo. Hay mucho intercambio de conocimiento aquí, y me gusta dedicarle un rato cada día. Esta entrevista es mi regalo para ti.

¿Qué opinas sobre exhibir tu intimidad?, volviendo al tema fundamental.

A ti te gusta mirarte al espejo y verte sin ojeras, sin arrugas, te encantaría que no se te encrespara el pelo cada día, y que no se te cayeran las tetas. Te gusta provocar como tu manera particular de gritar y llamar nuestra atención. Tratar de seducirnos con tus juegos de palabras, tus malabares sencillos- que no eres muy background. Muy autodidacta, muy egocéntrica, compites por llevarme a la cama, abiertamente.

¿El arte de la seducción en redes es un juego sin límites? En un bar, antes del 2020, el éxito terminaba en sexo. Y un acto físico ponía el PUNTO y FINAL.

Origen

EL PROPÓSITO que va adquiriendo más fuerza:

CAMINAR,

hacia unos nuevos PROPOSUEÑOS,

sin miedo.


La existencia puede sernos profundamente aburrida

cuando nos detenemos a observar; otro es el ritmo de los acontecimientos pequeños. Minúsculos. El destino puede habitar YA entre nosotros, entre la suciedad por las paredes de nuestra morada, o podemos estar separados temporalmente por un virus mortal. 

Shhhhh, silencio. A veces se producen cambios trascendentes; 

formas distintas entre nuestras manos. Escucharte, saberte, reconocerte. Describirte. Homenajearte, aquí en la cantonada.

¿Qué es lo que cambia y qué permanece?

¿Por dónde reconocer, reconectar? Por el principio, ¿por dónde buscar?… el Origen.

¿Es acaso posible? Para mí, había transcurrido muy poco tiempo; sin embargo cuando me vio se hizo la tal, 

y me persiguió con su conversación por la habitación, como si hubiera sido AYER, 

hasta que me preguntó en el cuarto de baño: ¿Y tú quién eres?

Entonces yo abrí los ojos para concentrarme y una arruga profundizó en mi entrecejo. Apenas un gesto y mis cejas se alzaron

Todo se hizo pequeño, como yo misma. ¿Qué importa?, te preguntarás. 

Como pude me colé en aquellos ojos vidriosos. 

 

Penetré más allá de las pupilas, 

atravesé las cortinas y nade hacia adentro de tus pensamientos, 

como ríos. 

 ¿Cuáles son nuestras preguntas?

Cuando lo íntimo es una terraza, todo sucede aquí. 

El tiempo de detiene en equilibrio.

-¿A favor o en contra? 

-¿A favor nos cansamos menos? ¿Y para qué tanto esfuerzo?

Entra.

Lo invisible se hace visible.

La pintura dibuja una huella, que es testigo del suceso.